El juego de mente para perder peso: Parte 2
La semana pasada, publicamos los primeros 5 puntos en “El juego de mente para perder peso: Parte 1”, donde discutimos consejos psicológicos y trucos que puedes aplicar a tu vida. La pérdida de peso se trata de cuánto comes y de tu nivel de actividad, pero también se trata de la forma de pensar y entrenar tu mente. Este factor puede ser el más difícil de todos, pero es definitivamente posible y, si puedes dominarlo, ¡lo más probable es que mantengas el peso para el resto de tu vida! ¡Qué pensamiento emocionante! Ahora, vayamos a los últimos cuatro puntos de la pérdida de peso y la mente…
6. Gratificaciones: No sólo comida
Es irónico que los que están siguiendo una dieta están constantemente pensando en comida. Cuando estás tratando de ser saludable, la comida es vista como el premio máximo y se usa a menudo como parte de un sistema de auto-recompensa. A cambio, toma algún tiempo de tu apretada agenda y disfruta de algo que normalmente no harías, ya sea comprar un nuevo lápiz labial, ir al cine por la tarde, o recibir un masaje – cuanto más auto-complaciente, es mejor. Esto te dará algo que esperar, te hará sentir e incluso ver mejor, y garantiza que no arruinarás tu buen trabajo.
7. Aprende a amar tu cuerpo
Hablando de obtener un masaje, un estudio de la Universidad Estatal de Ohio ha demostrado que las mujeres que aceptan sus cuerpos son más propensas a tener mejores hábitos alimenticios. Un masaje puede ayudar a las mujeres a lograr esta aceptación, ya que al dejarse tocar por otra persona, las mujeres pueden llegar a estar más cómodas con sus cuerpos, incluso si no han alcanzado aún su peso ideal.
8. Conoce tus desencadenantes
Ciertas personas, situaciones o emociones pueden ser desencadenantes que amenazan tus mejores intenciones de comer bien. Podría ser un amigo crítico, un trabajo estresante o sólo simple aburrimiento, pero todos sabemos que hay momentos en que comemos, aunque no estamos realmente hambrientos, o hacemos malas elecciones de alimentos cuando estamos siendo arrastrados por nuestras emociones. Es necesario identificar estos factores desencadenantes. Mantener un diario de alimentos realmente puede ayudar con esto. Entonces, cuando eres capaz de identificar el gatillo, necesitas hacer frente a la causa si es posible, ya que está en el corazón del problema más grande. En un aspecto más serio, si tus problemas de peso comenzaron mientras estabas creciendo, los problemas psicológicos eran y probablemente aún son factores importantes, por lo que podría valer la pena hablar con un profesional para tratar de superar estos problemas.
9. Cree en tu método
Muchas personas que se embarcan en un nuevo plan de alimentación saludable son reincidentes seriales, por lo que es comprensible escuchar una actitud como “Si esto no funciona, nada lo hará” cuando has estado allí antes. Sin embargo, este tipo de pensamiento negativo puede realmente dañar tus mejores intenciones. Piensa en el concepto de pensamiento positivo cuando se trata de una enfermedad; la creencia de la persona en el éxito hace posible que se vea a sí misma como curada, y su cuerpo obedece. Entonces, si estás comenzando un nuevo plan de alimentación saludable, tomar un suplemento efectivo para perder peso, o un nuevo regimen de ejercicio, ten fe que este es el comienzo de un nuevo tú, y nunca subestimes el poder de los pensamientos positivos.
Este artículo puede ser uno de los más importantes que jamás hayas leido referido a tu pérdida de peso. A menudo olvidamos lo importante que son nuestras mentes para influir en nuestras decisiones y alcanzar nuestros objetivos. Sin embargo, si tenemos el conocimiento correcto, estamos permitiéndonos ser más poderosos. Como puedes haber oído antes, la pérdida de peso y una vida saludable no es una cosa de lunes a viernes, y tampoco es una cosa temporal hasta que alcanzas la meta, ¡es un estilo de vida y una opción!