Por qué la balanza miente al tomar fentermina
Es una historia demasiado familiar: comes más sano y los números no ceden; haces ejercicio, pero la balanza no parece notarlo; luego notas que tu ropa te queda más suelta y te paras en la balanza esperando que hoy sea el gran día que finalmente diga que… ¡AUMENTASTE 1 kilo! ¡Desde ayer! ¿¡Qué!? Este es un problema muy común para quienes toman fentermina para perder peso, y puede ser lo más frustrante del mundo. Bueno, déjame decirte lo que tal vez sospeches desde hace algún tiempo: ¡tu balanza es una gran mentirosa! ¡Aquí llegaremos a la verdad de por qué miente la balanza con fentermina y cómo puedes encontrar otras maneras de medir tu éxito!
Lo que la balanza te dice y no te dice
La balanza es información. Te dice cuánto pesas en el momento en que te subes a ella y nada más. No te dice nada de la composición de tu peso, si has perdido grasa, ganado músculo o si el balance de agua de tu cuerpo ha variado desde la última vez que te subiste. Te da información, es cierto, pero sin contexto la información es inútil. Ganar un kilo de grasa de un día para el otro es imposible, ya que deberías haber comido 7.000 calorías extra, lo que probablemente recordarías. Incluso comer 7.000 calorías en una semana es difícil: ¿por qué la balanza dice que pesas un kilo más que la última vez?
El primer factor es el peso de agua: no beber suficiente agua durante el día hace que tu cuerpo piense que el agua escasea, así que conserva el agua que tiene, lo que significa un exceso de peso para ti. Comer demasiado sodio también causa que tu cuerpo retenga agua, así que es mejor evitar las comidas procesadas, y no solo los bocadillos salados obvios como las patatas fritas o las galletas: media taza de postre instantáneo contiene casi cuatro veces la cantidad de sodio que medio kilo de nueces saladas. Otras comidas potencialmente altas en sodio son los frijoles enlatados, las sopas, los cereales y las galletas.
Otro factor que influye en la balanza es el glucógeno. Esta es una reserva de energía en el cuerpo que puede fluctuar dependiendo de lo que hayas comido durante el día, pero es normal experimentar cambios de peso de agua y glucógeno de hasta 1 kilo por día, incluso sin variar tu ingesta de calorías o tu nivel de actividad. Estas fluctuaciones no tienen nada que ver con perder peso, aunque pueden generar algunos pesajes dramáticos si eres propensa a obsesionarte con la balanza.
Perder peso no significa perder grasa
Los fisiólogos del ejercicio nos dicen que para almacenar medio kilo de grasa necesitas comer 3.500 calorías más de las que tu cuerpo puede quemar. Así que si cuentas calorías y la balanza sube de un día para el otro, es probable que sea por el agua, el glucógeno y el peso de tu cena. La regla de las 3.500 calorías también funciona al revés, así que necesitas quemar esa cantidad para perder medio kilo. Generalmente solo es posible perder entre medio kilo y un kilo por semana, y si bien no es raro que quienes comienzan a tomar fentermina pierdan cerca de 4 kilos en una semana, es físicamente imposible que todo eso sea grasa: están perdiendo agua, glucógeno y músculo.
Perder músculo no es algo para celebrar, ya que es un tejido metabólicamente activo. Mientras más músculo tienes, más calorías quema tu cuerpo, incluso cuando estás sentada, ese es uno de los motivos por el cual una persona en forma y activa puede comer considerablemente más que alguien que hace dieta y no sabe que está destruyendo su tejido muscular. No solo el músculo es más valioso para tu cuerpo que la grasa, sino que también ocupa menos espacio, así que perder grasa y ganar músculo te hará ver más delgado, incluso si la balanza dice que pesas lo mismo o más. Es útil comparar la grasa y el músculo con plumas y oro: un kilo de cada uno pesa un kilo, pero obviamente querrás perder la molesta y abultada masa de plumas y conservar el menos visible y más valioso oro. El problema con la balanza es que no diferencia entre los dos, por lo que su poder de determinar cuánta grasa has perdido es muy limitado.
Más allá de la balanza
Tu peso es solo uno de los aspectos de tu progreso y, en muchos casos, ni siquiera es el más importante. Desafortunadamente para la mayoría de nosotros, el número en la balanza es un factor determinante en nuestro éxito o nuestro fracaso. Usar tu peso como la única medida del éxito es como comprar una casa basándose únicamente en los metros cuadrados que tiene: seguramente es muy bonito tener 300 metros cuadrados, pero ¿qué pasa si están al lado de un basurero municipal? Lo mismo pasa con perder peso, el número de la balanza no puede decirte qué pasa dentro de tu cuerpo, si estás construyendo músculo y quemando grasa, o cuán fuerte y en forma te estás poniendo, o cuán motivada y energizada te sientes. Si pesarte te motiva positivamente, no hay motivo para modificar lo que haces. Sin embargo, si pesarte te hace sentir un fracaso, tal vez sea momento de probar algo nuevo.
De hecho, una de las mejores herramientas de medición eres tú. ¿Cómo te ves? ¿Cómo te sientes? ¿Cómo te queda tu ropa? ¿Tus anillos están más sueltos? ¿Tus músculos se sienten más firmes? Estas son las verdaderas medidas del éxito. Si estás ejercitándote y comiendo bien, no te desanimes por un pequeño aumento de peso en la balanza: las fluctuaciones son perfectamente normales. Espera que pasen e intégralas a tu proceso: todo es cuestión de mente sobre balanza.
Pensar en la situación en reversa tal vez te ayude a verla más claramente: imagina que has alcanzado tu peso ideal, ¿qué te haría sentir peor, subirte a la balanza y ver que ganaste medio kilo o descubrir que tu ropa está más ajustada que de costumbre? La ropa, ¿verdad? Así que olvida la balanza y préstale atención a los otros signos de que estás poniéndote más saludable y perdiendo peso: concéntrate en tu salud y en cuánto mejor se siente tu cuerpo, en cómo duermes mejor y te sientes menos estresada, o en tu desempeño y que te estás poniendo más rápida y fuerte. Incluso mejor, concéntrate en lo bien que te sientes luego de hacer ejercicio o cuando tomas decisiones saludables de comida. Hacer más de las cosas que te hacen sentir bien hará más fácil hacerlas día tras día.
¿Tienes una buena relación con tu balanza o estás cansada de sus mentiras y estás considerando deshacerte de ella para siempre? ¿Cómo mides tu progreso mientras pierdes peso con fentermina? ¡Deja un comentario abajo y cuéntanos!